Siete años de sufrimiento y martirio ha vivido una familia buscando a su niña Arisbeth que fue robada por un sujeto hace siete años en el poblado de Santa María Chiconautla, caso que ha quedado en el olvido de las autoridades.
Arisbeth Sánchez Izalde, quien tenía unos días de haber cumplido sus 15 años, fue robada a unos metros de su domicilio al salir a comprar golosinas a la tienda el 25 de febrero del 2013 en el entronque de las calles Álvaro Obregón y Miguel Hidalgo de mencionada comunidad.
Hecho que sucedió en compañía de su hermano que en ese entonces tenía 10 años, quien dio a conocer los trágicos acontecimientos después de que fue abandonado por el desconocido. en la zona de Ojo de Agua, en el municipio de Tecámac.
Ese día dijo un hombre de complexión robusta con corte militar que conducía una camioneta tipo Windstar color verde los interceptó y les preguntó por la ubicación de un centro de salud.
Pregunta que solo fingió, para acercarse a los Menores y después sacar un arma y bajo amenazas los obligó a subir a su unidad.
Por algunas horas el robachicos, transitó por varias horas, para después esposar a Arisbeth y abandonar al menor en calles oscuras.
Mientras los padres preocupados realizaban la búsqueda de los pequeños, fueron notificados que su hijo había sido localizado, sin embargo Arisbeth había sido robada por el sujeto hecho que destrozó a la familia.
Sin dejar de buscarla, se presentaron ante las autoridades correspondientes e iniciaron la denuncia que quedó registrada con número de carpeta 344610360176713 por el plagio de Arisbeth quien cursaba el tercer año de secundaria.
Desde ese día comenzó la pesadilla para la familia, que pedían a las autoridades apoyo para localizar a la menor.
Solo fueron las primeras semanas que personal del Ministerio Público, realizaron la búsqueda de Arisbeth, esto en compañía del padre de la menor y después poco a poco abandonaron la investigación y dejaron en el olvido en caso.
La omisión de las autoridades tanto municipales, estatales y federales, en brindarles apoyo, no les impidió a continuar con la búsqueda y seguir visitando hospitales, Semefos, sin tener éxito.
Así transcurrieron los días, semanas, meses y años, hasta que las autoridades ofrecieron una recompensa de 300 mil pesos, a quien proporcionará datos veraces para localizar a la niña que estaba lista para realizar su examen para ingresar al nivel bachillerato.
Cabe mencionar que durante su búsqueda, solo hubo rumores de que la estudiante de secundaria había sido localizada sin vida, sin embargo al presentarse ante la PGJ, solo les mostraron prendas de jovencitas que no pertenecían a su hija y tampoco les mostraron ningún cuerpo, por lo que el hallazgo ya no se confirmó.
Hace unos días se cumplieron siete años que Arisbeth fue plagiada y aunque las autoridades no tuvieron avances en la investigación y con el paso del tiempo archivaron el expediente, sus padres que lloran su ausencia no descansarán hasta encontrarla.